miércoles, 4 de junio de 2008

Selección Nacional entrenó en Chicago

CHICAGO, Estados Unidos - Oficina de Prensa de la Comisión Sudáfrica 2010.- No solo mejoró el clima, sino también el espíritu de nuestros guerreros. La lluvia se alejó y el tibio sol puso un marco especial alrededor del Complejo del Estadio Toyota. El comando técnico jefaturado por José Del Solar preparó una sesión de entrenamientos de alta exigencia, que permitió evaluar la gran respuesta de los seleccionados, que cada día se compenetran mejor y abrazan la ilusión de llegar en óptima forma para enfrentar y derrotar a Colombia, el próximo sábado 14 de junio, cuando se reinicien las competencias por la fase de clasificación al Mundial de Sudáfrica 2010, en Lima.

Y saben que en ese camino está primero el compromiso de este domingo ante México, rival al cual también aspiran vencer por más jerarquía que tenga. Respecto a este duelo amistoso internacional, hoy los organizadores informaron que el partido será adelantado una hora, es decir que se jugará a las 7:00 p.m., -ya no a las 8:00 p.m.-, por un acuerdo adoptado con la televisión.

Hoy el desayuno de los jugadores se sirvió de 8:30 a.m. a 10:00 a.m. Se iban formando postas de acuerdo a la voluntad que tuvo cada jugador para bajar a tomar los primeros alimentos del día. Pero a las 10:30 a.m. el grueso del plantel, a un solo paso, se dirigió al ómnibus que los trasladaría hasta el Complejo del Estadio Toyota.

El preparador físico Alejandro Richino y el asistente técnico Marcelo Asteggiano se habían adelantado al grupo para dejar dispuesto los circuitos que iban a seguir los muchachos. Solo Alberto Rodríguez, Reiner Torres y Juan Vargas iniciaron un trabajo diferenciado al borde del campo. Reiner luego se sumó a sus compañeros cuando se hicieron los movimientos tácticos en espacio reducido. En los test físicos como en el trabajo con pelota se puso especial énfasis en un aspecto: la velocidad de reacción, para recuperar el balón, rotarlo apenas en un par de toques y pasar de inmediato al ataque.

Se quiere un equipo automatizado y agresivo, sólido en marca, creativo en la volante y efectivo cuando se tenga la oportunidad de encarar hacia el gol. Las cargas de trabajo se seguirán dosificando hasta alcanzar el mejor rendimiento posible, en ese afán de encontrar el equilibrio futbolístico, pues Colombia no puede llevarse puntos de Lima, además que hay que dejarlo todo en la cancha para cosechar algún punto adicional en la visita a Uruguay, el 17 de junio en Montevideo.